A la derecha de la ruta nacional 40
bajando hacia el sur
acunado en el ombligo del Piltriquitrón
la montaña madre que nunca pestañea.
Un Bolsón de aguas entre Puelo y Epuyén,
la cabeza del indio contemplando Chile
escrutando su mirada el corazón andino.
Estoy tendido entre la espesura de cipreses dorados
sobre el frondoso lecho de una chacra
sintiendo el latir acompasado de los arroyos
la elegancia de un Tero raseando sobre las aguas
bajo un cielo de petalos de Pataguas
y un espléndido arcoíris de bandadas de Bandurrias.
El Palo Santo introduciendo el Alfajor
en la punta del paladar,
desayunando "acción poética patagónica"
que "a besos entiendo y a veces no".
La vida derritiendose como un exquisito helado de pura Jauja.
Allá, aferrado a la señal de la ruta, como un tango, exclamo:
"fue un amor visitarte placer de mi vida".
PD: A Viviana Re por ser y existir.
A las generosas paredes de "Acción Poética" y a "Jauja"
– la mejor heladería de Argentina.
bajando hacia el sur
acunado en el ombligo del Piltriquitrón
la montaña madre que nunca pestañea.
Un Bolsón de aguas entre Puelo y Epuyén,
la cabeza del indio contemplando Chile
escrutando su mirada el corazón andino.
Estoy tendido entre la espesura de cipreses dorados
sobre el frondoso lecho de una chacra
sintiendo el latir acompasado de los arroyos
la elegancia de un Tero raseando sobre las aguas
bajo un cielo de petalos de Pataguas
y un espléndido arcoíris de bandadas de Bandurrias.
El Palo Santo introduciendo el Alfajor
en la punta del paladar,
desayunando "acción poética patagónica"
que "a besos entiendo y a veces no".
La vida derritiendose como un exquisito helado de pura Jauja.
Allá, aferrado a la señal de la ruta, como un tango, exclamo:
"fue un amor visitarte placer de mi vida".
PD: A Viviana Re por ser y existir.
A las generosas paredes de "Acción Poética" y a "Jauja"
– la mejor heladería de Argentina.
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